Aquí os desmentimos cinco mentiras que seguro que habréis oido, leyendas urbanas que la gente las toma por verdades universales. Gasfriocalor.com se convierte en… ¡Los cazadores de mitos!
Los mitos pueden entretenerte o no, pero nunca debes creértelos. No sabemos de donde proceden, ni quien los inventó, pero sabemos que están ahí y que hay que diferenciarlos de la realidad. El problema viene dado cuando los mitos forman parte del sistema de creencias de una comunidad, la cual los considera historias verdaderas. Es en ese punto cuando la gente los acaba adoptando como verdades universales. En nuestro mundo, el mundo de la calefacción, también existen mitos y leyendas, pero nada tienen que ver con cíclopes o minotauros… Sino más bien con «listillos» que crean sus propios consejos para ahorrar en calefacción. A continuación, cazamos y desmontamos 5 mentiras sobre la calefacción.
1. «Es mejor tener la calefacción encendida que ir apagándola y encendiéndola constantemente».
Este mito está especialmente extendido y cobra vida justo al entrar el invierno. Se dice que apagar y encender la calefacción consume mucho más energía que mantenerla encendida a temperatura constante. Eso es mentira. Aunque al encender la calefacción tendremos un pico de gasto, a la larga el ahorro se acaba notando y merece la pena. Bajar la temperatura a 16ºC durante la noche supone ahorrar un 13% respecto a mantener la calefacción encendida a 20ºC.
2. El calor apenas se escapa por las ventanas.
Alguien alguna vez dijo: «No pasa nada por instalar los radiadores justo debajo de las ventanas.» Nunca más se volvió a saber de él. Se cree que se gastó todo su dinero en las interminables facturas de gas que pagaba cada año. Y es que hay quien cree que el calor que se pierde por las ventanas (aunque estén bien cerradas) casi ni se nota en la factura del gas. Pues bien, la realidad es diferente, hasta una cuarta parte de la energía producida en los hogares se pierde por las rendijas de las ventanas. Una buen remedio es instalando ventanas de doble cristal que reducen pérdidas de hasta un 50%.
3. Las calderas de condensación necesitan radiadores grandes.
Otra mentira como un piano. Un radiador de un tamaño normal es perfectamente compatible con una caldera de condensación. Aunque si que es cierto que si el radiador es fuera más grande ahorraríamos más, ya que la caldera trabajaría a menos potencia.
4. No puedes instalar calefacción con paneles solares.
¡Claro que puedes! Los paneles solares térmicos tienen un depósito que acumula calor y claro que pueden contribuir al sistema de calefacción de la casa. Lo que sí que es cierto es que son más recomendables usarlos para calentar el agua caliente (te ahorras un 70%) que para calefacción (40%).
5. El «calor azul»… ¡Es lo mejor!
He aquí un producto de marketing. La publicidad promete que el llamado «calor azul» es la mejor opción para calentar tu casa. Pero a efectos prácticos, no es verdad. Al ser un sistema que emplea resistencias para calentar además de ser ineficiente, es muy caro. En realidad, el «calor azul» es muy parecido al clásico radiador eléctrico de aceito, pero en este caso, con otros fluidos en su interior.
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